La panna cotta o panacota se originó en el Piamonte, una región montañosa del noroeste de Italia. Este postre, conocido internacionalmente durante al menos cuatro décadas, es famoso por su simplicidad. Consiste esencialmente en crema endulzada y estabilizada con gelatina, lo que permite preparar un postre con antelación. Tradicionalmente, se sirve desmoldada, pero si se prepara en grandes cantidades, es más práctico hacerla en vasitos o copas individuales para evitar complicaciones al desmoldar. La receta es adaptable, por lo que puede ajustarse tanto para 2 como para 20 personas.
Además, siendo un postre que se puede preparar con antelación, es ideal para reuniones y eventos, ya que permite a los anfitriones dedicar su tiempo a otras preparaciones. La panna cotta puede personalizarse con diferentes sabores y toppings, lo que la hace versátil y atractiva para distintos gustos y ocasiones.
Información de la receta
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de reposo: 6 horas
Tiempo total: 6 horas y 15 minutos
Raciones: 6
Categoría: Postre
Tipo de cocina: Italiana
Calorías: 250 kcal por porción
Ingredientes de la panna cotta de vainilla para 6 personas
- 500 ml de crema de leche
- 70 g de azúcar
- 6 g de gelatina (aproximadamente 3-4 hojas)
- Media vaina de vainilla
Para servir:
- Frambuesas
- Azúcar
Preparación de la panna cotta de vainilla
Colocar la gelatina en un bol con agua fría para que se hidrate.
En una cacerola, verter la crema de leche. Abrir la vaina de vainilla y raspar las semillas. Añadir tanto las semillas como la vaina a la crema.
Incorporar el azúcar a la crema y calentar a fuego medio, removiendo hasta que el azúcar se disuelva por completo.
Cuando la mezcla esté caliente pero no hirviendo, retirar del fuego. Exprimir bien las hojas de gelatina y añadirlas una a una a la crema caliente, mezclando bien hasta que se disuelva completamente.
Dejar enfriar ligeramente la mezcla. Verter la panna cotta en los moldes seleccionados. Para desmoldar fácilmente, es preferible usar moldes de metal tipo flanera.
Si se prefiere servir la panna cotta sin desmoldar, pueden utilizarse vasos o copas.
Refrigerar los moldes durante al menos 6 horas para permitir que la panna cotta solidifique. Puede servirse tal cual o con frutos rojos, ya sea enteros, en trozos o hechos puré con un poco de azúcar para hacer un coulis. Desmoldar y acompañar con el topping elegido.
Pasos resumidos de preparación
- Hidratar la gelatina
- Raspar las semillas de la vaina de vainilla
- Calentar la crema con el azúcar y la vainilla
- Añadir la gelatina hidratada y mezclar bien
- Verter la mezcla en los moldes y refrigerar al menos 6 horas
- Desmoldar y servir con fruta fresca o coulis
Consejos adicionales
Para garantizar una textura perfecta, asegúrate de no hervir la crema. Además, si deseas variar el sabor, puedes añadir otros ingredientes como ralladura de cítricos o licor.
La panna cotta puede ser decorada con hojas de menta fresca o chocolate rallado para darle un toque especial. Experimenta con los ingredientes y encuentra tu combinación favorita.