Existen numerosas maneras de preparar huevos al plato. Este término simplemente se refiere a que los huevos se sirven en el mismo recipiente donde se cocinan. No obstante, una de las formas más tradicionales de hacerlos es usando jamón o chorizo, tomate y guisantes. En esta receta específica, optamos por emplear virutas de jamón que se mezclan mucho mejor en el conjunto que los clásicos trozos de jamón o las rodajas de chorizo. Cada bocado promete una experiencia equilibrada de sabores. Para obtener estas virutas de jamón, puedes comprarlas ya listas o hacerlas tú mismo picando finamente un trozo de jamón de aproximadamente 100 gramos, ya sea con un cuchillo o utilizando un procesador de alimentos. Como se puede ver en los ingredientes, no incluimos sal adicional ya que el jamón proporciona la cantidad necesaria. Para dar un toque especial, podrías sustituir el jamón serrano por jamón ibérico y disfrutar aún más esta receta.
La elección de los ingredientes es vital para alcanzar un equilibrio perfecto en cada bocado. Las virutas de jamón, más pequeñas que los habituales tacos, permiten que todos los sabores se mezclen adecuadamente, mejorando la experiencia culinaria. Además, usar jamón de alta calidad, como el jamón ibérico, podría elevar significativamente el perfil de sabor de este plato sencillo.
Información de la receta
Tiempo de preparación: 5 minutos
Tiempo de cocción: 26 minutos (12 minutos de sofrito + 14 minutos de horneado)
Tiempo total: 31 minutos
Raciones: 4
Categoría: primer plato o plato principal
Tipo de cocina: española
Calorías: 158 kcal por cada 100 gramos
Ingredientes para huevos al plato para 4 personas
- 4 huevos
- 300 g de salsa de tomate casera
- 150 g de guisantes (frescos o congelados)
- 100 g de virutas de jamón serrano o jamón ibérico
- 1 cebolla
- 30 g de aceite de oliva virgen extra
- Pimienta negra recién molida
Instrucciones para preparar huevos al plato
Primero, precalienta el horno a 180 ºC para asegurarte de que está a la temperatura adecuada cuando los huevos estén listos para ser horneados. Luego, pica finamente la cebolla usando un cuchillo o una picadora, según lo que prefieras.
Es importante que el horno esté bien caliente antes de empezar a cocinar los huevos, esto asegurará que se cocinen uniformemente. Picar la cebolla es un paso crucial, ya que su tamaño influirá directamente en cómo se sofrita y se integra en el plato final.
A continuación, calienta el aceite en una sartén a fuego medio, añade la cebolla picada y cocínala durante unos 5 minutos, removiendo constantemente para lograr un dorado uniforme.
La cocción de la cebolla con aceite de oliva le añade una base aromática al plato. Remover constantemente es esencial para que la cebolla no se queme y se cocine de manera uniforme.
Luego, incorpora las virutas de jamón y mezcla bien, cocinando por 2 minutos adicionales.
Incorporar las virutas de jamón en este punto permite que su sabor se distribuya de manera homogénea a lo largo del sofrito. Esos minutos adicionales de cocción ayudan a que el jamón suelte sus jugos y se mezcle a la perfección con la cebolla.
Añade los guisantes, mezcla todo y cocina durante otros 2 minutos, siempre removiendo.
Los guisantes agregarán un toque de color y una textura adicional al plato. Es fundamental seguir removiendo para que no se peguen al fondo de la sartén y se cocinen de manera uniforme.
Finalmente, integra la salsa de tomate y cocina todo junto durante 3 minutos más, sin dejar de remover.
La salsa de tomate une todos los ingredientes y añade un sabor reconfortante al plato. Remover constantemente es vital para que todos los ingredientes se impregnen del sabor del tomate.
Retira la sartén del fuego y distribuye la mezcla en 4 recipientes individuales aptos para horno. Haz un pequeño hueco en el centro de cada uno con una cuchara, para colocar ahí los huevos.
Este paso asegura que cada porción tenga una presentación uniforme y atractiva. Crear el hueco permite que el huevo se mantenga en el centro del recipiente, cocinándose de manera uniforme.
Rompe los huevos uno por uno en un bol pequeño y, con cuidado, transfiérelos a los recipientes preparados con el sofrito.
Esto te permite verificar que cada huevo esté en buen estado antes de añadirlo a los recipientes. Además, facilita el control durante el proceso de colocación en el sofrito.
Espolvorea un poco de pimienta negra recién molida sobre cada yema y hornea los huevos en el horno, colocando la bandeja en la ranura central, a 180 ºC, con calor arriba y abajo, durante 14 minutos. La clara debe estar completamente cuajada y la yema lista para mojar con pan. Pasado este tiempo, los huevos al plato estarán listos para servir.
La pimienta negra le añade un toque de especiado que realza el sabor del huevo. Controlar la temperatura y el tiempo de cocción asegura un resultado perfecto, con la clara bien cocida y la yema ligeramente líquida.
Resumen de la preparación
- Precalentar el horno a 180 ºC, calor arriba y abajo.
- Picar cebolla y dorar por 5 minutos. Añadir virutas de jamón y cocinar por 2 minutos. Agregar guisantes y cocinar por otros 2 minutos. Finalmente, añadir salsa de tomate y cocinar por 3 minutos más.
- Distribuir la mezcla en 4 recipientes aptos para horno, colocar un huevo en cada uno y espolvorear pimienta negra molida.
- Hornear durante 14 minutos a 180 ºC.
El resumen proporciona una visión clara y concisa del proceso, facilitando la preparación. Sigue estos pasos para garantizar un resultado excelente en cada ocasión.