Elaborar labneh en casa no tiene grandes complicaciones, la clave está en ser paciente y disponer de un espacio en el refrigerador. Lo llamamos “queso de yogur” ya que partiendo de un simple yogur natural, conseguimos una textura y un sabor muy similar al de un queso para untar.
Es un plato tradicional de los aperitivos en Oriente Medio, se puede disfrutar en el desayuno o como tentempié antes de una comida. Debido a su consistencia espesa, se pueden moldear fácilmente pequeñas bolas y luego conservarlas -en el refrigerador- sumergidas en aceite de oliva virgen extra de buena calidad, que se integrará perfectamente con el labneh al untarlo.
Detalles de la receta
Tiempo de preparación: 5 minutos
Tiempo de reposo: 24 horas
Duración total: 24 horas
Porciones: 8
Categoría: aperitivo
Tipo de cocina: Oriente Medio
Calorías: 75 kcal por porción
Ingredientes para labneh (8 personas)
1 kg de yogur natural, preferiblemente espeso tipo griego
Sal
Instrucciones para hacer queso de yogur
Combina el yogur con una pizca de sal fina y colócalo a desuerar en un colador cubierto con un par de hojas de papel de cocina sobre un bol. También puedes usar una tela de queso que se consigue en farmacias. Deja reposar en el refrigerador durante al menos 24 horas.
Adicional a esto, podrías agregar hierbas secas o ajo en polvo antes del desuerado para darle un toque distinto al labneh.
Transcurridas las 24 horas, observarás un cambio notable en la textura del yogur. Los bordes se despegarán fácilmente del papel de cocina. Arroja el suero.
Lleva el labneh a un plato o recipiente. Ya está listo para usarlo de diversas maneras, tal cual como un queso para untar, como dip para galletas o crudités, o sazonado con un poco de aceite de oliva, pimienta negra y hierbas frescas.
Un consejo adicional es formar pequeñas bolas de labneh y conservarlas en un frasco con aceite de oliva y tus especias favoritas, esto no solo realza el sabor, sino que también prolonga su duración.
Resumen del procedimiento
Mezclar el yogur con sal y dejar escurrir
El labneh estará listo después de al menos 24 horas
Utilizar como queso fresco para untar
Si prefieres un sabor más intenso, puedes dejar el yogur en el refrigerador por 48 horas para obtener una textura aún más firme y un sabor más concentrado.